Materiales de relleno

Cualquier herida, intervención quirúrgica o proceso infeccioso puede dar lugar a la aparición de una cicatriz inestética, si…

• Resulta muy visible por su forma o color.
• Se ha ensanchado.
• Está hundida o deprimida.
• Los bordes no están perfectamente aproximados y forma un escalón.
• Está elevada respecto a la piel normal, se ha hipertrofiado o ha formado un queloide.
• Produce una distorsión de algún rasgo de la cara.
• No es posible hacer desaparecer totalmente una cicatriz, pero es posible modificarla para “disimularla” o hacerla poco perceptible. Para ello es necesario analizar los diferentes factores que hacen que esa cicatriz sea inestética y corregirlos.

La corrección de la cicatriz
La mayoría de las veces es necesario extirpar quirúrgicamente la cicatriz y volver a cerrar la herida de diferente forma, la mayoría de las veces, cambiando la dirección de la sutura. En ocasiones, es necesario descomponer la cicatriz en diferentes sub-unidades y tratar cada una de ellas de diferente forma. Las técnicas de sutura son diversas (z-plastia, w-plastia, cierre geométrico, etc…) y su cirujano le informará del más indicado en su caso.

En ocasiones, después de la corrección quirúrgica de la cicatriz es necesario alguna otra intervención para corregir depresiones o defectos de forma, mediante lipoescultura o materiales de relleno. También es necesario muchas veces algún retoque final mediante aplanamiento o resurfacing con láser.